miércoles, 6 de enero de 2010

DÍA DE REYES


Hoy es día de Reyes. Ayer pasó la Cabalgata, dejando en el suelo mojado un reguero de caramelos, peluches y balones. Amenazaba lluvia pero se contuvo, tales son los poderes de los Magos de Oriente. Los niños, ilusionados querían acostarse pronto para ver si se cumplían las expectativas que pusieron en sus cartas, después de haber sido buenos y traer excelentes notas.


Hoy sigue siendo día de Reyes. La lluvia no ha perdonado, y un ambiente triste y gris circula por las calles de pueblos y ciudades. Los contenedores están llenos de cajas y envoltorios, indicios de derroche aún en tiempos de crisis. El dios del consumo reina sin que le tosan y mañana mismo se abrirá la veda de las rebajas, y la cuesta sacrificada del año pasado se prolongará durante el mes de enero.

De enero a enero, y tiro porque me toca. Junto a las cajas rotas de los juguetes y la basura, brilla la luz mortecina de los sueños sin cumplir a la espera de mejores días. Comenzó la Navidad lloviendo, y termina igual, en un capicúa de agua y nubes.

Mañana jueves sonará el despertador. La tiranía del reloj reanuda su rutina.

Y eso sí, post festum, pestum. A los romanos no se le escapaba ningún detalle, listos como pocos.


No hay comentarios: