sábado, 21 de noviembre de 2009

LEAN


LEAN


Háganme un favor: lean y después de esta breve parrafada, vuelvan a leer si no les incomoda en exceso. Lean en sus casas, en el trabajo, a hurtadillas – si la presión y los jefes lo permiten- lean por las calles, en el campo o en la ciudad, desnudos en el dormitorio, o vestidos en el salón, arrellanados confortablemente en su sillón preferido o en la taza de su retrete.

Lean por costumbre o por necesidad. Igual que las comidas, el vasito de tinto, la charla amigable, la cerveza o el placer fugaz del sexo, inscríbanlo entre sus actividades imprescindibles. Da igual un capítulo, un párrafo corto o un par de páginas. Da lo mismo un periódico que un librito que un novelón interminable.

Siéntense y pidan como los niños chicos el pecho, a demanda. Leer no perjudica ni se derivan efectos secundarios irreversibles tras las tomas. Auséntense un ratito del diario trajinar. Vivan otras vidas: sean ricos o pobres, aventureros o cobardes, nobles o plebeyos, monjas o redomadas putas si es su voluntad.

Viajen por el mundo sin moverse de su butaca. Conozcan otras gentes, otras culturas que le enriquecerán sin duda, y si lo que quieren es viajar el pasado o dar un salto al futuro que aún no ha llegado, vayan al estante o a la biblioteca más cercana y compren el billete para iniciar la aventura. Cuando regresen serán mejores personas. La experiencia es la madre de la ciencia como se ha comprobado y a más vidas escanciadas, mayor poso vital acumulado.

Háganme un favor, lean, y que sus hijos los vean. Y regálenles libros para que se aficionen y practiquen. Vuelvan a lo primitivo. Que olviden la TV, los juegos de maquinitas, las inevitables consolas.

No hay nada como un libro. Se lo agradecerán con los años. Da igual la ocasión. Un libro nunca está de más. Lean hasta el extremo de que cuando no haya más sitio sea natural colgar los libros de los árboles.

Por favor, insisto: lean. No se arrepentirán.


6 comentarios:

D.V.M. dijo...

Eso es lo mejor, leer, pero se esta perdiendo poco a poco y aunque digan que somos muy escandalosos es verdad. He intentado "picar" a algunos niños a leer y no hay manera, ni regalandole comics leen, no son capaces de formarse en sus cabecitas las peliculas que yo me hacia, para ellos son solo letras, como si leyeran en cirílico. No saben lo que se pierden.
un saludo!

Esperanza Cabello Izquierdo dijo...

Otra entrada que me parece estupenda, y otra vez te pido permiso para copiarla y pincharla en el corcho de la biblioteca. En un par de semanas será el día de la lectura en Andalucía. Podríamos utilizar tu "arenga" para las clases.
Saludos. Esperanza

Esperanza Cabello Izquierdo dijo...

No había leído bien el primer comentario, y debo decir, en honor a la verdad y aunque contradiga a mi amigo Damián, que los chavales y chavalas leen, leen mucho, y es una alegría. El año pasado registramos una media de 15 libritos (leídos en las clases) durante el curso entre los niños y niñas de primero, cada uno de ellos con su corrspondiente diario de lectura y comentarios.
Esperemos que sigan así.
Saludos. Esperanza

D.V.M. dijo...

Eso es una alegría Esperanza, pero en mi caso particular no consigo hacer que esos "malditos enanos" (cariñosamente) me lean jejeje.

Casiano dijo...

Esperanza, puedes disponer de ella para lo que quieras, y gracias.

Esperanza Cabello Izquierdo dijo...

Pues muchas gracias, Casiano, ya está preparada. Saludos. Esperanza